Noveno cómic de la saga Dragon Boys, los jóvenes dragones ahora están separados tras lo sucedido en el cómic anterior. Sabrina se encuentra en su vecindario para pasar el rato con sus amistades y lo que comienza como una noche de amigos, se convierte en el escenario de un crimen cuando el cazador no-muerto Sarnost aparece y mata a uno de los amigos de Sabrina. El espíritu de Dragón Oscuro logra resurgir y aprovecha la conmoción para comenzar a atacar. Está vez Dragón Oscuro empieza a atacar a sus víctimas por medio de los sueños como di fuera Freddy Krueger. Leon Demon se presenta al enterarse del crimen ocurrido y se reúne con Sabrina. Ahora ambos van a tener que lidiar con dos letales enemigos mientras Sarnost y Dragón Oscuro no tardaran en encontrarse cara a cara. La historia de este cómic es la misma de la película Freddy Vs. Jason. Al igual que el sexto cómic, este también es un slasher. Mientras en los primeros cómics Dragón Oscuro era como Lord Voldemort, aquí pasa de eso a convertirse en un Freddy Krueger que controla los sueños y puede matar a sus víctimas desde ahí. Claro que se omitieron algunas cosas que hubieran quedado bien. Entre ellas un evento canónico sobre la muerte de Dragón Oscuro que fue diferente al que se vio en el final de Jake Long, El Dragón Occidental, más contexto sobre el origen de Sarnost y el trágico pasado de Sabrina. Todo está explicado en la lista de curiosidades. Hay un par de agujeros de guion debido estas y otras cosas que no se incluyeron, pero el cómic está bien para una lectura rápida.
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